11 de julio de 2011

Aia

No hay porqué alejarse mucho de casa para sacar una buenísima ruta de la manga. El plan original una vez más ha tenido que ser modificado por causas meteorológicas...es lo que tiene el Norte y sus 50 días de sol al año. Por algo está tan verde todo.



Amanece nublado y según avanza la mañana las primeras gotas comienzan a tocar los...caminos humedeciéndolos así que partiendo de Orio nos encaminamos hacia Aia para después acercarnos al Ernio.



Desde Orio subimos primero por sendas fáciles y después por rampas infernales hasta la Venta de Iturrioz.



Sendero con Ernio al fondo



Toda ruta ciclable 100% que se precie siempre tiene algún porteo...



El tiempo levantó y solo quedaron unas pocas nubes agarradas a la cabeza del Ernio.



Cerca de Iturrioz con Izarritz detrás del Bicho



Desde las faldas del Ernio volvemos por el GR34 hasta donosti por un camino muy bueno que combina las pistas de tierra con tramos de senda y algún enlace de carretera.



Desde Andatza hasta Usurbil vamos eligiendo caminos ya conocidos que nos aproximan a la costa. 

Ya en el camino de la costa lo seguimos hasta Orio completando un bucle muy ciclable y de facil avanzar, lo que Oihana agradece.



Llegamos a Kukuarri con un bonito atardecer.

El sendero costero presenta tramos buenos sin que la mano del hombre lo estropee como ha hecho en Jaizkibel...aunque pronto los jerifantes de culoplano de la Diputación se encapricharán de civilizar lo poco que queda en Igueldo para cumplir la promesa de urbanizar el camino de Santiago del Norte.



Desde Kukuarri se puede ver el Ernio y el Izarraitz

Unas reflexiones personales que a algunos os darán exactamente igual, pero que me apetece plasmar:

La moda de hacer accesible el monte a todo el mundo está destruyendo senderos de montaña convirtiéndolos en caminos fáciles que quitan encanto al entorno natural donde se ubican.

Es una pena que se recurra a empedrados y encementados como el de la subida a la cola de caballo del Valle de Ordesa, en vez de recurrir a regeneraciones naturales y limitaciones de excursionistas. Se que es un dilema el antagonismo que existe entre la conservación de un entorno y la atracción de turismo, pero lo que no se cuida con esmero, en un futuro no será para nadie.

En esta misma línea está la adecuación del camino de Santiago del norte, ¿porqué no se limitan los organismos a regenerar los tramos más dañados en vez de reventarlos con retroescabadoras?

El cordal de Artikutza está experimentando la misma trayectoria de mejora donde las bicicletas están vetadas pero no la utilización de maquinaria para ensanchar el camino. La segunda fase de estas actuaciones posiblemente será la misma que en Ordesa...Empedrar para evitar trabajos anuales de mantenimiento que a la larga salen más caros.

Si continuamos así veo en 50 años un teleférico al Aneto con un puesto de souvenirs o un ascensor interno hasta la punta del Everest con un establecimiento de comida rápida en la cima.

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