El pasado invierno donde ha habido que buscar las buenas condiciones de la nieve con lupa, ha dado paso a una primavera lluviosa con la consiguiente pereza para salir a pedalear con barro.
Pero el pasado fin de semana parecía que los hayedos cantábricos estarían en todo su apogeo y no se podía dejar escapar la ocasión de senderear bajo su protección.
Donosti amanece con una desapacible niebla que nos obliga al Bicho y a mi a trasladarnos hacia el sur donde la lejanía del mar parecía que nos iba a dejar ver el sol. Pero en Lecumberri el tema continuaba cubierto y decidimos no hacer más kilómetros y adentrarnos en la espesa niebla.
No te alejes que no te veo!
El sol de mayo va disolviendo las nubes.
Rampas duras.
Tras la retirada tardía de las últimas nieves, las flores salen con fuerza.
Sendereando.
Los bosques a partir de ahora serán nuestro cobijo para las próximas rutas de la primavera.
Que bonita la foto de las margaritas y qué bonito Aralar... Los esquíes ya están colgados?
ResponderEliminarAgur
Ese Borjeta!!! La verdad es que el día estuvo muy vistoso. Primero con nieblas misteriosas y después con un solete muy agradable. El bosque está demasiado verde...hace daño a los ojos!
ResponderEliminarLas deslizaderas se están resistiendo ya que ahora me van saliendo más planes de biciclo que de nieve. Aunque alguna canal ya haría si se da el día...
Aúpa Mikel!
ResponderEliminarYa apetecería también una de burriclismo supongo.
Parece que este verano volveremos a tener como campamento base un baserri de Arrasate. A ver si podemos disfrutar de Aralar esta vez! y coincidir aunque sea en una barra!
Saludos!
Vicent